La investigación científica necesita un apoyo contundente con gestos, discursos y financiación.
El Ministerio de Economía del PP tiene paralizada una investigación pionera para prevenir el VIH, por trabas burocráticas a los investigadores españoles. Pero, además, se calculan que hay paralizados otros 30 contratos de investigación científica que, obviamente, son relegados en las prioridades de los políticos del PP.
En España y en la Comunitat Valenciana el maltrato a los investigadores y científicos está provocando la mayor fuga de cerebros españoles, investigadores que ven truncados sus proyectos de investigación forzándoles a irse para trabajar en otros países.
Es incomprensible, intolerante e injusto. No quiere darse cuenta el Gobierno actual que toda inversión en investigación científica redunde directamente en el conjunto de la sociedad. No deben ser tratados como una élite de investigadores, sino como un motor de desarrollo, su esfuerzo permitirá una mejor calidad de vida que compartiremos y disfrutaremos todos.
La investigación científica tanto en el ámbito institucional como en diversas entidades debe ser apoyada no sólo con bonitas palabras. Debe permitirse una mayor capacidad presupuestaria, agilizar al máximo las autorizaciones administrativas; un impulso real que compagine la investigación multilateral con intercambios de conocimiento y éxitos, dentro y fuera de nuestro país.
El gobierno del PP, aquí y allá, estrangula con sus propias manos nuestra capacidad de innovar, investigar y desarrollarnos personal y profesionalmente. Los socialistas entendemos la prioridad de la investigación científica, la apoyaremos con discursos y también con recursos, fomentándola para mejorar la calidad de vida de todos.