La educación como pilar fundamental del progreso.
Es obvio que para el PP el empleo y la educación no son sus prioridades. En nuestra tierra batimos récord de desempleo y de fracaso escolar, ante la parálisis de un gobierno que sólo ve los recortes como vía de acción, castigando presente y futuro de los ciudadanos.
La educación pública, de calidad y laica es una apuesta decidida de los socialistas y es una necesidad urgente en la prioridad política de nuestra sociedad.
No hay libertad sin conocimiento y no hay progreso colectivo fuerte sin unos cimientos educativos potentes, tanto en instalaciones, recursos humanos, técnicos y económicos como en contenidos.
Es urgente un esfuerzo inversor en medios, instalaciones y profesorado para formar en la igualdad y preparar a nuestra generaciones actuales y futuras para un mundo nuevo más competitivo, plural e inmediato.
La inversión pública en educación, en ciencia y tecnología es una apuesta socialista para el siglo XXI. Una apuesta que conlleva una mejora significativa de la capacidad inclusiva del sistema escolar, la adecuación definitiva de la donación profesional y la universidad a los nuevos retos sociales y empresariales que nos lleven a que, con libertad e igualdad, cada individuo pueda planificar su vida con garantías de éxito.
La inversión en educación es garantía de igualdad, progreso y libertad.