El tripartito del PP: Fabra, Rus y los imputados corruptos
Fabra no tiene ya margen de maniobra. No se aclara ni con los suyos; manifestando, reiteradamente, su incapacidad para dirigir el PP y anulándose para estar al frente de la Generalitat Valenciana.
Mientras los socialistas defendemos en todos los sitios, con fuerza y contundencia, la mejora de la financiación de la Comunidad Valenciana y la creación de un fondo para asegurar el estado del bienestar, el PP se esconde en sus escaños de las cortes cada vez más salpicados por la corrupción.
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La muestra del compromiso con nuestra tierra es constante, porque no queremos que ningún valenciano se quede atrás; creemos que se han de garantizar las mismas oportunidades y posibilidades, en la defensa de unos servicios públicos de calidad que permitan una vida digna a todo el mundo.
Mientras tanto Fabra gestiona su tripartito interno, un tripartito de miserias, de lucha de poder por la supervivencia personal de cada uno, olvidando su responsabilidad institucional.
¿Tripartito popular? Pues punto y final.