El PP ataca a los pequeños municipios.
Vivimos tiempos en los que necesitamos respuestas inmediatas y soluciones eficaces a nuestros problemas más cotidianos, y son los ayuntamientos la administración responsable más cercana que encontramos.
El municipalismo permite gobernar para las personas mirándoles a la cara, que los ciudadanos puedan reclamar los servicios que consideran necesarios. Pero la política de cercanía molesta al PP. La Generalitat valenciana, por ejemplo, suprime 250.000 euros para subvenciones a municipios de menos de 3.000 habitantes. En su peculiar política de imposible ajuste de cuentas, Fabra ha decidido que cerca de 400 municipios no tienen por qué contar con servicios básicos relacionados con sanidad o educación.
El PP lo piensa todo a lo grande: formulas 1, Calatravas, grandes ciudades temáticas…olvidando que aquéllos que menos tienen necesitan de más apoyo y soporte. Necesitamos hablar de los pueblos y ciudades de y para las personas.
Los socialistas defendemos que todos tengamos oportunidades y posibilidades, que todos los pueblos de la Comunitat Valenciana cuenten con el respaldo de su administración autonómica y, que por el contrario, no sean los servicios directos a la ciudadanía los primeros en sufrir la tijera del PP sin tapujos!