Por un PSOE claro, con un proyecto por y para la gente. Por Juan Molina. Silla
Vivimos en la actualidad un escenario político sin precedentes, quizás comparable en la distancia con la época de la transición a la democracia de nuestro país, pero sin duda, una situación novedosa y en la que el PSOE representa a un número de ciudadanos que queda muy lejos de aquella multitud de seguidores que históricamente ha estado al lado del partido en cada cita con las urnas. La crisis social y económica que todavía atraviesa el país, ha sido vinculada a la acción de gobierno del PSOE y desde muchos medios de comunicación, fuerzas políticas y opinión pública se han encargado de hacer responsable y/o corresponsable en mayor grado al partido, y además de forma muy exitosa, puesto que ese mensaje ha calado mucho en la sociedad española.
Todavía hay quien insiste y utiliza de forma partidista este argumento. Por supuesto no pretendo eximir de responsabilidades a nadie, pero para eso somos un partido de gobierno, un partido que en momentos tanto buenos como malos ha tenido que tomar decisiones importantes para el país, a diferencia de otros que vienen ahora dando lecciones de moralidad y del buen hacer. Como bien dice mi padre, » no es lo mismo predicar que dar trigo». Sin duda este duro y difícil periodo ha dejado tocado y puesto en cuestión la relevancia o importancia que debe tener el PSOE dentro de la política española para muchos ciudadanos a la hora de llevar a cabo la transformación y el cambio que necesita el país.
En estos tiempos hace falta mucha pedagogía por parte de todos los socialistas, dar constantes explicaciones y poder así convencer a la gente de la calle, a la gente de a pie, que este partido es el único capaz de encabezar y liderar el cambio, pero para ello hay que tener muy claro que proyecto de país queremos, que defendemos y que queremos ofrecer.
No hay que obviar que donde se gana a la gente no es en la tribuna de las Cortes Generales, que también, sino en la calle , mirando a la gente a los ojos y estoy bien seguro que como yo, la mayoría de simpatizantes y militantes continuamenten hacemos ese trabajo que tan sano y positivo resulta para el partido, y repito, por eso es muy importante saber que queremos ser dentro de la política española y que queremos ofrecer.
Siempre he entendido a éste, mi partido, como la herramienta idónea para llevar adelante los distintos procesos reformistas y de progreso que la sociedad necesita en cada momento y no entiendo porque en esta ocasión tiene que ser distinto.
Trabajando con lealtad a los principios y valores del partido, defendiendo a la clase obera, siendo garantes de la justicia social y luchando por la desigualdad tendremos mucho ganado, pero hay que creérselo y trabajárselo.
Sin duda el futuro del país está ligado al del PSOE, y para un mejor país necesitamos al mejor PSOE. Es momento de trabajar, de abrir puertas y ventanas, de oir, de escuchar, de dialogar. Es momento de la gente, de las personas. Es momento de ideas, de ideas frescas y para ello hay que tener muy en cuenta el factor humano y esto pasa por mayor intervención de los militantes, de las bases del partido, de todo aquel que quiera sumarse. Para ello es imprescindible y fomentar y facilitar la participación y poner la política al servicio de todos.
Juan Molina es militante de la agrupación socialista de Silla